Sobre el perfil del emprendedor se ha escrito mucho desde tiempos de Drucker, pero sobre el del manager los perfiles están menos claros, pues la mezcla entre gestión y político se hace en muchas ocasiones muy confusa. Hay muchos libros que analizan qué hace un buen manager, pero en pocos se habrá tratado el tema de la codicia como rasgo peculiar....

Este tema me lleva a plantear la que considero una buena idea para este blog: la "Revolución de los tímidos". Ser Gerente implica, sin duda, muchas cualidades o no cualidades, algunas buenas, otras posiblemente malas (el afán de generalizar siempre es malo si no se lee con buena intención, así que mejor hacerlo así por favor) la codicia o ansias de poder puede ser una de ellas visto lo visto. En el mundo de internet se han abierto muchas oportunidades para personalidades que seguramente no tendrían nada que hacer en el mundo de la gerencia tradicional. Internet permite, desde un sillón, descalzo, mal vestido y mal peinado, que miles de "tímidos"comuniquen entre sí en chats, blogs, foros y redes sociales. Esto de por sí ya es una revolución, pero más lo será si pensamos en el mundo de pequeñas empresas que nacen y triunfan de la mano de personalidades que nada tienen que ver con los perfiles tradicionales. Es muy posible que creadores de modelos de negocio de enorme valor sean personajes que disfrutan con el paso de horas frente a sus ordenadores, tecleando, codificando e imaginando formas de envolver a sus usuarios. La idea de una revolución de tímidos me ha parecido sugerente, seguramente porque es una idea muy novelística, en la que no sería difícil imaginar diversos personajes, carne de cañón para el fracaso en un época anterior, convertidos ahora en estrellas que llevan audiencias de millones de personas a sitios web que han desarrollado. Espero que a los tímidos no les dé tampoco por la codicia, pero no menos que lleguen a controlar las mentes de las persons en exceso: si la obsesión por el dinero es malísima, no creo que lo sea peor la de aislarse del entorno mirando una pantalla.